Mantenga el contacto visual durante la conversación.

Note que su pequeño esté observando los movimientos que realizamos para hablar. (Movimientos de la lengua, labios y arcadas dentarias)Hable pausado vocalizando, para que observe cómo se producen los sonidos.

Deje que perciba cada sonido para que le sea fácil imitarlo de manera espontánea.

Hable pausado vocalizando, para que observe cómo se producen los sonidos.

Esté pendiente de su postura corporal y el cierre labial. Mientras esté con la boca cerrada le será más fácil deglutir bien.

Juegue a imitar sonidos y palabras.

Juegue con palabras erradas, el error lo hará reaccionar y querer decir la palabra de modo adecuado. 

La mejor manera que una palabra sea automatizada y la use con naturalidad, es repetirla en el entorno familiar de forma espontánea.

Los movimientos de la lengua pueden estar apoyados de recordatorios con la mano para que recuerde dónde producir el sonido.

Juegue a las adivinanzas, donde las palabras que se van a adivinar son justamente las que se están aprendiendo a decir de forma correcta.

Juegue frente al espejo, vocalizando palabras y viendo quién lo hace con la boca más grande gesticulando bien.

Aproveche la rutina del lavado de dientes para ejercitar la lengua y crear conciencia propioceptiva es decir comprendiendo lo que se está trabajando.

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