JUGAR no significa tener la cabeza en blanco, no es detenerse en el tiempo y espacio para no crear. ¡Todo lo contrario! Demanda creatividad, seguir procedimientos, consignas, encontrar formas novedosas de solución, ampliar nuestras experiencias, incrementar nuestro lenguaje. Puede resultar bastante agotador, ya que acapara nuestra atención y nos abstrae hasta que lleguemos a una conclusión, un fin, sea este un juego de mesa, un partido de fútbol o básquet, o un videojuego.

En las últimas décadas el avance tecnológico ha sido abrumador. A los adultos nos ha costado mucho adaptarnos a los cambios; sin embargo, los niños con gran naturalidad manejan tablets, teléfonos digitales y así, cada día aparecerán nuevos aparatos a los que ellos se enfrentarán y serán parte de su día a día.

Analizaremos y trataremos de dar respuesta a algunas interrogantes que surgen a raíz de las inquietudes sobre si es oportuno o no poner a disposición de los niños todos estos aparatos.

¿Pueden ser beneficiosos estos juguetes tecnológicos? 

* Las tablets al igual que los juegos de nuestra época permiten a los niños interactuar con el mundo.

* Mientras más interactivo es el juego puede resultar más beneficioso para el aprendizaje.

* Según estudios de la Universidad de Wisconsin (USA), descubrió que los niños de entre dos y tres años eran más propensos a responder a pantallas táctiles que a las que no requieren de interacción (como en el caso de la televisión).

¿Cómo crear hábitos para el uso de la tecnología?

* Muy importante imponer reglas. Por ejemplo, a la hora de la comida nadie debería estar con su tablet o teléfono. En estos momentos, los padres son quienes dan el ejemplo, son ellos los primeros que deben cumplir esta norma, propiciar la conversación con los hijos.

* Crear hábitos destinando horarios, estableciendo tiempos de permanencia ante las pantallas, de tal manera que se fomenta la regulación en los niños para que luego de jóvenes se autorregulen sin presencia de los padres.

¿A qué edad se recomienda interactuar con los aparatos tecnológicos?

* Es difícil establecer cuál es la mejor edad para darle un teléfono celular a los hijos; sin embargo, algunos estudios recomienda que sea a partir de los 13 años.

* Otros artefactos como el computador o la tablet, será a partir del tiempo en que los padres consideren que el hijo ya asume una responsabilidad en el cuidado y uso correcto, además de las necesidades propias del estudiante.

* A los padres se les recomienda estar alertas en el uso de las redes sociales.

No podemos negar el poder de atracción que tienen estos aparatos en los niños y jóvenes; al parecer estos juegos pueden ser muy beneficiosos así como los juegos clásicos (jases, trompos, sogas o mundo, etc) lo fueron para aquellos que antecedemos a esta generación. Recuerden, sus hijos sólo están haciendo lo normal, “interactúan con el mundo”, están haciendo uso de los nuevos juegos a su alcance.

Publicado en diario Publimetro (versión digital) el 9/04/2017