Durante el verano, niños y adultos disfrutamos de diversas actividades al aire libre; entre nuestras preferidas están las visitas a la piscina o a la playa. El contacto directo y permanente con el agua puede facilitar el desarrollo de inflamaciones o infecciones, causando algunas molestias a nuestros oídos cómo irritación de canales auditivos, picazón, sensación de oído tapado e incluso dolor.

En algunos casos, la supuración o salida de líquido del oído; puede hacer que la audición se vea afectada de manera temporal.

Además debemos tener en cuenta que el uso excesivo de los hisopos puede generar acumulación del cerumen, irritación e incluso lesiones a la delicada piel del conducto auditivo externo.

A continuación les damos algunas recomendaciones a tener en cuenta para el cuidado de nuestros oídos y así disfrutar del verano planamente:

• Inclina la cabeza hacia los lados, si entra agua en los oídos.
• Utilizar el bloqueador solar en ambas orejas. 
• Evitar introducir cuerpos extraños o hisopos en el canal auditivo externo.
• Secar los oídos después de cada baño, para evitar la humedad en el conducto auditivo externo.
• Usar tapones a la medida para protegerse de la humedad (piscina, mar o baño) en caso practiques natación de forma permanente o presentes perforación timpánica.
• Tener especial cuidado durante el baño, acudiendo a piscinas y playas con aguas no contaminadas. 
• Procurar zambullirse despacio para evitar la entrada brusca de agua al oído. 
• Evitar bucear a más de un metro de profundidad.

Es importante recordar que ante cualquier síntoma de molestia o dolor, acudamos a un especialista para que prescriba el tratamiento adecuado y ponga fin a cualquier tipo de problemas.

¡Cuidando nuestros oídos, disfrutamos más el verano!

Publicado en diario Publimetro (versión digital) el 23/01/2017