Las actividades físicas y deportivas presentan diferentes beneficios.
Actualmente algunos estudios afirman que niños y adolescentes dedican más de seis horas al día a actividades sedentarias como ver televisión, navegar en internet o chatear. Si bien es beneficioso que hagan uso de estos medios tecnológicos para socializar y comunicarse, es mucho el tiempo en el cual están sentados, echados sobre la cama o sofá, implicando riesgos para la salud a corto y largo plazo dado que puede implicar hábitos nocivos como una mala alimentación, aumento de peso, problemas en la visión, cambios en los estados emocionales, aletargamiento, problemas para dormir, dolores de espalda, entre otros.
Se sabe de los beneficios de realizar actividades físicas en cualquier etapa de la vida, pero lo es sobre todo, cuando el cuerpo se encuentra en crecimiento y desarrollo, es decir durante la infancia y adolescencia. Estos efectos positivos suelen tener un mayor impacto en los niños que con el Trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), pues por sus mismas características, inatención, hiperactividad e impulsividad, las actividades físicas y deportivas les permiten canalizar su exceso de energía y actividad de modo seguro y adecuado y, a su vez, desarrollar sus habilidades motoras, equilibrio, manejo del espacio, regular sus emociones y conducta a través de rutinas y hábitos así como fortalecer competencias como el trabajo en equipo, tolerancia a la frustración, el seguimiento de instrucciones y reglas.
A partir de esta idea surgen inquietudes sobre qué actividades deportivas podrían ser las más recomendables para los niños y adolescentes con TDAH. Aquí les presentamos algunas de ellas:
# Los deportes en equipo son una buena alternativa, pues les permiten formar parte de un grupo, desarrollar el sentimiento de pertenencia, donde logrará sentirse querido y aceptado. Implica seguir reglas y normas de grupo, respetar turnos, proponer metas comunes y tratar de alcanzarlas, resolver conflictos proponiendo alternativas, entre otros. Así mismo, les aporta el sentido de la responsabilidad, al comprender la importancia de su rol en el equipo, desarrollar habilidades sociales mediante la interacción con sus compañeros, aprender a ganar y perder, ser empáticos, asertivos y promueve valores como la solidaridad y respeto. Algunos de los deportes recomendados son: rugby, futbol, básquet y balón mano.
# Los deportes individuales son también beneficiosos para los niños con TDAH pues refuerza la confianza en sí mismos, sintiéndose hábiles o competentes, proponiéndose objetivos y retos con uno mismo. La autoestima mejora en tanto observan cómo van mejorando poco a poco, en base a su esfuerzo y dedicación. Este tipo de deportes implican una experiencia uno a uno con el entrenador y el alumno, esforzándose por atender y concentrarse, memorizar rutinas y movimientos. Algunos de los deportes más recomendados son las artes marciales como karate y judo las cuales fomentan el control de la autodisciplina y valores, deportes acuáticos como natación y juegos al aire como el trekking y ciclismo.
Es importante que siempre se tomen en cuenta las preferencias de los niños o adolescentes con respecto al deporte que quieran practicar, dándoles alternativas y señalando los beneficios de la actividad física en contraste con una vida sedentaria. Así mismo, el ejemplo y la motivación por parte de los padres es fundamental, alentando el esfuerzo de sus hijos, promoviendo el cumplimento de rutinas y hábitos para lograr constancia en las prácticas deportivas.