Existen riesgos a los que se encuentran expuestos, niños y adolescentes, cuando se tiene acceso sin restricciones ni orientación a las redes sociales.
Según resultados de la Encuesta Nacional de Hogares del INEI (2014) el 39,2% de la población mayor a seis años accede a internet. En la encuesta realizada por el Consejo Consultivo de Radio y Televisión (CONCORTV), los niños prefieren jugar en red (69%), buscar información para sus tareas (62%) y usar las redes sociales (35%). Los adolescentes usan redes sociales (78%), buscan información para sus tareas (71%) y juegan en red (41%).
Hoy en día, internet y las redes sociales se ha convertido en una herramienta que facilita las interacciones sociales tanto en nuestro círculo social inmediato (nuestros familiares y amigos con las cuales convivimos) como con personas que se encuentran en lugares alejados y el contacto físico es limitado. Pero, para muchos, y he aquí lo riesgoso, lo es para conocer a nuevas personas, intentar establecer amistades pero con personas que no conocen, pudiendo tener acceso a información falsa, no conociendo en realidad su sistema de creencias ni valores. Con ello se exponen a ser víctimas de acoso, abuso o comportarse, por conformidad y obediencia, de forma tal que puede llegar atentar contra su vida o la de los demás.
Asimismo, su uso inadecuado o excesivo puede resultar perjudicial para el desarrollo psicosocial, cognitivo y psicomotriz de los usuarios, quienes en su mayoría son adolescentes y jóvenes. El abuso de las redes sociales puede generar aislamiento social, ansiedad por querer conectarse en todo momento, afectar la autoestima, entre otros.
Al conocer sobre estos hechos, como padres es importante hacer una reflexión y preguntarse sobre el rol activo y formador con sus hijos frente a estos casos. Si como padres han decidido que su hijo tenga acceso a las redes sociales, entonces deben considerar ciertas reglas y recomendaciones para trabajar en conjunto:
• Regular los horarios y estar atento a los contenidos que frecuentan. Como padres tienen el derecho de acceder a las páginas web, aplicaciones y redes sociales de sus hijos.
• No utilizar como sistema de premios o castigos los dispositivos tecnológicos y acceso a redes a fin de mantener a sus hijos ocupados o tranquilos.
• Crearse un perfil personal en las diversas redes sociales que actualmente se usan (Facebook, Instagram, Pinterest, entre otros) y aprender a utilizarlo para estar enterados y controlar las actividades que realizan sus hijos.
• Orientar a los hijos en la toma decisiones responsable sobre qué información compartir y con quién, por qué hacerlo o no y las consecuencias de ello.
• Enseñarles los aspectos básicos de la seguridad para mantener la privacidad y seguridad de su biografía, perfil y acceso a desconocidos.
Como padres presentes y preocupados en la formación integral de sus hijos se debe fomentar un diálogo permanente y abierto con sus hijos, brindándole la confianza necesaria para que les cuenten sobre lo que encuentran, leen o ven en las redes y, frente a cualquier duda o algo les genere incomodidad sean ustedes la primera fuente de búsqueda y consejo.